Protección Intumescente y Pintura Epoxi en Zamudio

En nuestra siguiente obra hemos realizado la protección intumescente a la estructura metálica y vigas de una nave nueva en la localidad de Zamudio, provincia de Vizcaya. Posteriormente, nos encargamos de la pintura plástica de las paredes y la pintura epoxi del suelo.

Comenzado con la puesta a punto de la nueva nave, acorde con la normativa de prevención y protección contra el fuego, procedimos a aplicar 3 capas de pintura intumescente a toda la estructura y vigas metálicas de la dicha nave. La pintura intumescente por defecto tiene un color blanco de bajo poder cubritivo, el cual puede ser modificado hasta darle el color deseado. En nuestro caso, bajo petición del cliente, hemos aplicado pintura intumescente en color gris claro.

     

Dicha pintura intumescente, dará protección a la estructura frente a un posible caso de incendio, retrasando considerablemente el deterioro de la misma y permitiendo un mayor margen de tiempo para frenar el posible derrumbe en caso de incendio.

     

A continuación procedimos a realizar la aplicación de pintura plástica a las paredes y techos de la nave industrial. Comenzamos por una imprimación a base de resinas acrílicas y tras 2 capas más de pintura plástica proyectadas con bomba airless, obtenemos una apariencia totalmente renovada, en color blanco y con el acabado de calidad superior que proporciona una buena pintura y la aplicación mediante sistema de pistola y bomba airless.

     

Con todo ello terminado, procedimos a realizar la aplicación de pintura epoxi al suelo de toda la nave industrial. Como es habitual comenzamos con el acondicionamiento previo del suelo. Para ello desbastamos toda la superficie de hormigón, con el fin de abrir el poro y eliminar todo resto de grasa o aceite.

     

Al tratarse de un hormigón nuevo, la superficie era bastante óptima y el acondicionamiento previo era menor, aunque así mismo es importante abrir el poro correctamente para que la adherencia de la posterior pintura epoxi sea la óptima.

     

Una vez preparada la superficie, procedimos a aplicar una capa de imprimación epoxi al agua, la cual nos servirá de puente de adherencia entre el hormigón y la posterior pintura epoxi. Al tratar con epoxi al agua desde la base de la resina epoxi, podemos colorear el mismo según precisemos para ir dando fondo y cubrimiento a la superficie.

     

Tras dejar secar la misma, procedimos a aplicar 3 capas de pintura epoxi, delimitando en diferentes colores la zona de producción y almacenaje, dando un aspecto altamente estético y acorde a la imagen de la empresa.

     

Como resultado final, obtenemos la reforma de una nave industrial con una apariencia totalmente renovada y profesional, con el fin de preservar una buena imagen por muchos años. Tanto la pintura plástica en paredes, como la pintura epoxi en suelos, nos permitirán gozar de un espacio de trabajo limpio y resistente.

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