En nuestras siguientes obras hemos realizado de manera consecutiva la aplicación de pintura intumescente e ignífuga a dos instalaciones, una ubicada en Bilbao o la otra en Guipuzcoa.
Comenzando por Guipuzcoa, nos encontramos con la construcción de una nueva nave que tiene como estructura principal de soporte del techo vigas metálicas horizontales y verticales. La normativa actual contra incendios exige que dichas vigas lleven la protección antifuego correspondiente en cada caso.
En este caso se ha realizado una protección con pintura intumescente de grado RF-120, la cual en base a las condiciones de las vigas aportarán una mayor protección a la estructura en caso de incendio.
Para ello, comenzamos la obra aplicando una imprimación especial para pinturas intumescentes. Aplicamos la misma a todas las vigas mediante la proyección con bomba de presión airless.
Una vez seca la misma, aplicamos 3 capas de pintura intumescente a todas las vigas, respetando un periodo de secado de 24 horas entre cada capa. Alcanzado así el espesor de pintura requerido para dicho tratamiento antifuego.
Para el caso de la obra de Bilbao, nos encontramos con la reforma de una nave ya existente. Al igual que las naves nuevas, las que llevan a cabo una reforma deben adaptarse a la normativa de protección contra el fuego actual.
Dicha nave cuenta con numerosas vigas verticales y horizontales, estructura en techos y entreplanta y una escalera metálica, los cuales precisan la aplicación de puntura intumescente también grado de protección RF-120. El proceso de aplicación es similar a la otra obra.
De manera adicional, esta nave está comunicada directamente con otras naves vecinas. En estos casos la normativa exige también la colocación de pladur ignífugo en los techos que estén comunicados con las naves vecinas para evitar así la propagación del fuego.
Para ello, colocamos 1 metro de pladur ignífugo a todo el perímetro correspondiente. A continuación sellamos todas las juntas y espacios con masilla y espuma de poliuretano ignífugas y terminamos la protección aplicando 2 capas de pintura intumescente sobre el pladur ignífugo, hasta alcanzar el espesor requerido para la correcta protección contra el fuego.
Concluida la protección, nuestra empresa se encarga de emitir los certificados correspondientes que garantizan el trabajo realizado y aseguran al cliente la aprobación de la inspección correspondiente.