Pavimentos Resina Epoxi Autonivelante
En nuestra siguiente obra hemos realizado la aplicación de un pavimento de resina epoxi autonivelante a los suelos de la planta de Ekin en Amorebieta, Vizcaya.
Ekin es una de las principales empresas de nuestra zona en su sector y es un placer para nosotros encargarnos habitualmente del mantenimiento de los suelos de sus plantas.
En esta ocasión, hemos desarrollado mantenimiento y aplicación de pavimento de resina epoxi a zonas nuevas en la planta de Amorebieta.
Hemos tratado varias zonas de la planta, una zona de almacenaje la cual presentaba un suelo previo de hormigón considerablemente deteriorado por el uso y vertidos, la zona correspondientes a los pasillos, la cual ya tenía previamente un pavimento epoxi el cual hemos mejorado aportando un sistema antideslizante y la zona de máquinas correspondiente a la producción, la cual es siempre la zona más difícil a tratar dadas sus dificultades y el correspondiente estado de los suelos.
Cada zona, al ser diferente y tener una base diferente, debemos tratarla con un sistema diferente. Comenzamos con la zona correspondiente al almacenaje. Dicha zona presenta un hormigón no tan deteriorado superficialmente, pero si con una cierto nivel de filtrado de aceites acumulado en sus capas superiores. Para este caso, el acondicionamiento previo ideal es preparar la superficie mediante el desbastado, siendo el mismo llevado a cabo por máquinas desbastadoras conectadas a aspiradoras, las cuales limpiarán y actuarán en la superficie de manera orbital. Al atacar la superficie de manera orbital, las piezas de acero con diamante harán un pulido que removerá algo menos de 1mm de la superficie, dejando la misma limpia y preparada para la aplicación del pavimento epoxi.
La siguiente zona es la correspondiente a los pasillos. Dicha zona ya presentaba un pavimento epoxi autonivelante previo, pero con acabado superficial liso. El problema de dicha zona es que con la presencia de aceites en el suelo, propios de la actividad de la empresa, la misma se vuelve algo resbaladiza. La solución para este caso es aplicar un sistema antideslizante multi capa epoxi. Para el acondicionamiento previo, a diferencia de la zona anterior, el pavimento epoxi actual había protegido el suelo de la penetración de los vertidos, entonces nos es suficiente con limpiar la superficie varias ocasiones con una máquina de limpieza y líquido desengrasante. Una vez seca, abriremos el poro del pavimento epoxi actual con una máquina lijadora industrial, que de manera orbital se encarga de rayar la superficie y favorecer a la adherencia del sistema posterior.
La última y más complicada zona a preparar, es la que abarca el espacio entre máquinas y producción. Dicha zona, al igual que la primera, tiene un suelo de hormigón, pero en este caso el mismo ha absorbido durante años una cantidad muy elevada de aceite y grasa y su preparación es más laboriosa porque hay que remover a mayor profundidad. Para ello utilizamos nuestra máquina fresadora o escareadora de suelos. La cual, a diferencia de la desbastadora o pulidora, no gira de manera orbital, si no como si fuera un rodillo, similar a las máquinas que retiran el asfalto viejo de las carreteras. Cuenta con piezas de acero y diamante, las cuales se encargarán de retirar un capa de hormigón cercana a a los 5mm de espesor. Se eliminará la capa de hormigón que sea precisa para que nuestro pavimento de resina epoxi se adhiera correctamente.
Una vez preparadas las 3 superficies a tratar, el posterior sistema para todas ellas es similar. Comenzamos aplicando 1 capa de imprimación epoxi con espolvoreado de arena de sílice, la cual nos ayudará a la adherencia de la posterior resina epoxi y generará una superficie rugosa que nos permitirá dejar un mayor espesor en cada capa.
Tras dejar secar, aplicamos una capa de resina epoxi autonivelante mediante el uso de la llana de dientes, sumado a ello espolvoreamos arena de sílice hasta saturar la resina, creando la base de los suelos con un espesor cercano a los 5 mms. Dicha base es la parte más resistente del suelo y es la encargada de nivelar y rellenar todos los agujeros, juntas y defectos del mismo.
A continuación aplicamos una segunda capa de resina epoxi autonivelante, aproximadamente de 2-3 mms de espesor. Dicha capa saturará el pavimento de resina previo, reduciendo la rugosidad que aporta la arena de sílice. El objetivo de esta capa de resina es aportar una mayor resistencia e impermeabilidad a la superficie, así como lograr un suelo correctamente nivelado.
Como parte final del pavimento, aplicamos dos capas de pintura epoxi con antideslizante incorporado, la cual dará el acabado a la superficie, aportando al mismo características antideslizantes, impermeabilidad y mayor facilidad a la hora de limpiar la misma. También será la encargada de aportar los colores que delimitarán los pasillos y zona de actividad, aumentando considerablemente la estética de la planta.
Como punto final, pintamos todas las rayas que delimitan las zonas, pasillos, salas y pasos de peatones con pintura epoxi, formulada especialmente para señalización en pavimentos interiores.
Como resultado final obtenemos un pavimento de resina epoxi autonivelante. Compuesto por unos 7 mms de espesor, con altas propiedades higiénicas, antideslizantes y sobre todo de resistencia y protección a los suelos de la planta. Sumado a ello, la alta estética que nos aporta el acabado epoxi.